domingo, 29 de mayo de 2011

Las dos caras de la maternidad 'joven' (Parte 2)

No fui una madre adolescente. Lejos de ello. G nació un mes y pico antes de que yo cumpliera mis 26 años. Para ese momento yo tenía una carrera universitaria, dos trabajos y dos años de convivencia recién cumplidos en mi haber. Y sin embargo, no se imaginan la cantidad de veces que tuve que responder si el embarazo había sido buscado, a gente que se animó a preguntarlo y a gente que sólo pudo insinuar la pregunta de la forma más indirecta que encontró.
Tuve que contar, entonces, que con J planificamos buscar un bebé un año antes de empezar a hacerlo, que en ese año dejé de fumar, fui a una nutricionista para bajar unos kilos, me hice todos los estudios recomendables, incluida la visita al odontólogo, y empecé a tomar ácido fólico cuando todavía no había dejado las pastillas anticonceptivas. Así que sí, fue buscado. Aunque tuviera que mostrar mi diario íntimo para demostrarlo.
Esta actitud de la gente, (junto con la de preguntarme si me iba a casar, la cual me sorprendió muchísimo más) me hace pensar que soy una madre joven. Joven para los tiempos que corren, redundamos siguiendo el post anterior. Y la verdad que eso me hace muy feliz.
Está genial tomarse su tiempo, como les decía antes, voltear muñecos durante los años locos de la soltería, hacerse un carrerón inimaginable. Pero el chip Susanitesco, en algún momento, va a volver a reclamar lo que es suyo. Y ahora me pregunto: ¿qué van a hacer todas las grosas que lograron ser CEO antes de los 35, cuando el tic tac del reloj biológico no las deje escuchar ni a su propia junta directiva? ¿Van a abandonar la carrera? ¿Van a tener hijos criados por niñeras y mucamas mientras ellas siguen pensando en Wall Street o en Tribunales? ¿Van a llevar a los chicos a la oficina? ¿O van a dejar de lado todo eso que supieron conseguir con tanto esfuerzo?
Yo tengo dos ventajas importantísimas para no dudar de que elegí el mejor camino para mí: por un lado, sé que soy la persona más infeliz cuando estoy soltera, jamás tuve levante ni pude hablar con un tipo que medianamente me gustara sin ponerme nerviosa y decir las boludeces más hundidoras. Así que vida de soltera coleccionando chongos, jamás. Y por otro lado, soy lo menos ambiciosa que hay, tanto que trabajo de una cosa cuando estudié algo distinto (soy psicóloga, ¿ya lo había dicho?). O sea, jamás podría hacer carrera de nada, o en realidad sí, pero en un campo diferente del que descubrí que me gusta verdaderamente,  que es la docencia.
El momento de tener a G era ese.  Ya había pasado todas las etapas, ya estaba 'lista', y, por sobre todas las cosas, ya no tenía más nada que esperar.
La verdad, que todo este tema de tener a G a esta edad me gusta principalmente por 3 motivos.
Los generales son,
-Por un lado, que me siento lo suficientemente 'chica' como para pasar con el bebé más tiempo tirada en el piso que sentada en una silla. Seguramente mamás de 35 o 40 años con bebitos también lo harán, pero así como siento que soy menos flexible que hace 10 años, lo seré mucho menos en 15 más! Además, siento que me gusta más haber afrontado el giro de 180º que obligatoriamente un bebé da a tu vida a esta edad que dentro de unos años, cuando mi vida ya se haya vuelto lo suficientemente estática y ordenada como me imagino que sucede después de muchos años de vida en pareja y sin hijos. Si me voy a tener que despertar de noche a dar la teta, cosa que ODIO, ok, mejor hacerlo ahora y que para los 40 eso haya quedado muuuuy atrás.
-Lo cual me lleva al punto 2, que es parecido. Si les soy sincera, yo tuve hijos por ese bendito chip que te insertan en la juguetería el día que comprás tu primera muñeca. Soy mujer, estoy sana, tengo pareja, tengo óvulos esperando ser fertilizados. HAY que tener hijos. The End. Como soy muy sobreadaptada, no se me ocurriría cuestionar semejante verdad. Y como soy muy competidora, qué mejor que hacerlo antes que las demás de mi edad. Es chocante lo que voy a decir, pero siento que ya cumplí el 50% del trabajo. Porque claro, la PD de este mandamiento sobre tener hijos, es que "no se debe tener sólo uno, los niños necesitan un hermano". Así que me faltaría uno más, y estamos. Estoy esperando que me agarre el mismo sentimiento de "tiene que ser ahora" que me pasó con G, que anticipo sucederá para cuando cumpla 30. Un chico de 5 y un recién nacido. No me parece el negocio del año pero al menos para cuando tenga 40, voy a tener el 100% del trabajo listo y 2 hijos que se queden a dormir en lo de los amigos. Una guacha, ya sé, pero entiendan que estoy hablando desde el costado más frío, descontamos todo lo lindo y gratificante que traen los hijos.

El 3er motivo es mucho más personal, y es también el más egoísta:
-Además de por una cuestión de competencia, a mi me convenía tener a G en este momento. ¿Por qué? Porque iba a ser el 1er nieto de mis viejos, el 1er sobrino de mis hermanas, el 1er bebé en mi grupo de amigas. Iba a ser la novedad, y entonces todos iban a estar más pendientes de él, y más dispuestos a ayudarme a criarlo. Cuando mis hermanas y mi mamá lean esto seguramente no se van a sorprender, a lo sumo confirmarán una sospecha. Pero sí, es verdad. Me alivia pensar que hay gente que realmente quiere tener un ratito para cuidar o jugar con G. Si mis hermanas y mis amigas estuvieran cada una ocupadas con sus propios niños, mi vida sería bastante más complicada. ¿Para cuando tenga el 2do? No sé, ¡me buscaré amigas más jóvenes!

En fin, la verdad que muchas veces me pregunto si habré tomado esta decisión de ser madre basándome en los motivos correctos. Y la respuesta es fácil: claro que no. Pero sin embargo acá está el fruto de mi inmadurez, de mi egoísmo, de mi competencia contra el mundo. Y lo amo con locura, y cada día agradezco más a todas esas razones equivocadas porque me regalaron 15 años de ventaja a la vida. Si yo hubiese esperado, ponele, hasta los 40, quizás los motivos que me hubiesen llevado a tener un hijo hubiesen sido más acertados. Quizás hubiese disfrutado todo de otra manera, con otro deseo. Quizás hubiese invertido esos 15 años en mí misma, en desarrollarme espiritual o laboralmente.
Pero hubiese pasado 15 años sin G, lo cual, ahora que lo conozco, me parece el peor panorama posible. Sigo eligiendo las tardes tirada en el piso, o revoleándolo por el aire, o cantándole canciones inapropiadas de cumbia y reggaetón, u horrorizando abuelas al dejarlo hacer básicamente lo que él quiere. Nada me da miedo, o casi. Porque soy joven, y J es joven, y nos quedan todavía muchísimos años de crecer los 3 juntos.

11 comentarios:

  1. clap, clap... aplausos... me encanta como ponés en palabras lo que muchas sentimos... yo como te conté en el anterior post tengo 28, fui mamá a los 24, y sí, fui joven, soy joven! y ya me siento aliviada de haber cumplido al menos con uno de los mandatos (me falta escribir un libro, porque plantar planté algunos arbolitos).. así que, ya estamos a mitad de camino!
    excelente!

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  2. Lo importante es que vos tomaste la decisión de tener un hijo cuando quisiste y estabas segura de ello. Fue una decisión acertada en el momento justo y es por eso que estás tan feliz.

    Los demás, viste, son de palo, que hablen o pregunten.

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  3. Blogger me tiene harrrrrrta!

    Dónde está mi comentario!?

    Bueno, te decía que es evidente que vos tuviste a tu hijo cuando quisiste y tuviste ganas y eso se nota, en lo feliz que sos. Porque estuviste segura.

    Lo que opinen lo demás, molesta pero te tiene que tener sin cuidado, que es la actitud que tomaste. Y está bien.

    Después cuándo uno tiene un hijo si a los viente, treinta o cuarenta, depende de la psiquis de cada una, de las circunstancias, de que si puede o no...

    Pero creo que lo más importante es estar seguro de querer tener un hijo... o no. Y estar feliz con la decisión tomada.

    Besitos!

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  4. COLECCIONAR CHONGOS y VOLTEAR MUÑECOS JAAAAAAAAAAAA!!!!

    Lo único de lo que estoy segura es de que no hay fórmulas ni planes que valgan. Yo de chica pensaba que para los 24 iba a estar casada con 3 hijos y no fue así. Menos mal! Siempre algo se resigna, y siempre la gente opina, pregunta, aconseja... Creo que la cuestión es ser feliz con lo que la vida nos pone por delante, a veces planificado y a veces no...

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  5. Nena! sabés que yo tb tengo 26 y no tengo la suerte de contar con un hombre con el que planificar tener un bebé...cosa que me apena todos los días por todas las cosas que acabas de mencionar! te re felicito por haber planificado tu vida de ese modo....la comparto completamente y espero que no me llegue un baby a los 35 porque me muero!

    Un besot!

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  6. Epa epaaaa yo tengo 35 y no me siento ninguna vieja chota! jajaja Aunque amenazo a Matias todos los dias con que se va a quedar hijo unico, porque otro terremoto como él no lo soportaria!

    Creo que cuando vamos a la secundaria, todas pensamos que a los 25 vamos a ser lo suficientemente grandes y maduras como para tener un bebé, pero después llegàs a los 25 y no siempre te sentis pronta para asumir tal responsabilidad. Es una decision muy personal elegir cuando ser mamà, ademàs las ganas tienen que coincidir con hacerlo con la persona que se quiere y en el momento adecuado. Porque te podés planificar todo a la perfeccion, pero como decia Tusan "puede fallar" (y esto me buchonea mal mis 35!!! jajaja).

    No importa por las razones que lo hayas hecho, importa que G llena tus dias de amor y vos los suyos!

    Besos

    PD. Pronuncias el nombre de G en castellano o en italiano?

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  7. Valen, vamos que llegamos! Con 24 años eras MUY joven! Vas a ser la envidia de las madres cuando egrese del secundario! jajaja

    Alicia, gracias! Siempre palabras de aliento y contención :) Blogger te lo agradece de mi parte devolviéndote comments robados!

    Mariela/leti, 24 años y 3 hijos hoy me parece sacado de una película de terror! Pero sí, es lo que muchas imaginamos de chicas... Después, lo que toca toca, la suerte es loca!

    Mili, la verdad que pensé que eras más chica, no sé por qué. Mirá, me servís de ejemplo! Mientras le hago el enésimo purecito a G pienso "pensar que Mili está haciendo laburos grosos para afuera, y yo acá, literalmente mirando el agua hervir!" Y capaz a vos te encantaría cambiarme el lugar al menos por un ratito!

    Mai, no te ofendas! La edad es un número que no condiciona ni limita nada... Y es como vos decís, está genial planificar todo, pero la vida puede tener planes muuuy distintos para vos! Yo a los 20 JAMÁS hubiera esperado ni llegado a imaginar este futuro en particular! Ahora, el día que conocí a J... creo que mi útero dio un respiro de alivio porque presintió que no nos íbamos a quedar a vestir santos (te retruco la frase moderna!)
    Ah,y al nombre de G lo pronuncio en castellano oficialmente y en italiano muchas veces, cuando jugamos! Pero muchas veces se me escapa el Gatusso también...

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  8. Este blog definitivamente va demasiado rápido para mí!
    Escribo igual: Me reí con la pregunta de si G. era buscado... confieso que tal vez yo lo hubiera pensado (jamás pregunto algo así). Yo hubiera podido darte consejos de cómo evitar esa pregunta: comprás departamento, a los 27, te casás a los 28, un año después cambiás el auto y te embarazás, parís un mes y medio después de cumplir 30. Casi nadie te pregunta nada... y lo más gracioso es que MC no fue buscada, jajaja
    Pero hablando de eso, vos sabés que justamente siempre pensé en esa distinción: digo, puede que haya bebés no buscados, que no significa que sean no deseados; mucha gente, la mayoría, diciendolo con un dejo como de bebés de segunda categoría o algo... y en realidad los tan preciados bebés buscados hay que ver por qué motivos son buscados!!!!
    Ojo, no digo que los tuyos no sean válidos, creo que sí, como bien decís había un verdadero deseo de tener un hijo además de las circunstancias y eso es lo importante.
    Respecto de la edad prefiero no hablar, estoy sensible, en pocos días cumplo 35; y ni tuve otro bebé ni llegué a CEO (bueno, no creo que se me dé en estos tres días, jaja)
    No, hablando en serio, creo que primero, como decía en el post anterior la mayoría de las veces no es algo que uno pueda elegir cuando tener a los hijos, salvo que siempre tengas plata y te hagas una inseminación cuando quieras, sino la vida afectiva condiciona mucho todo. Por otro lado, hay que ver las diferencias individuales, no puedo juzgar porque no tuve hijos en mis 20 y tal vez la cosa hubiera cambiado, pero en general pienso que lo que perdí en flexibilidad lo gané en madurez y en paciencia. Ojo, creo que en muchos aspectos era muy inmadura a los 25/26, o tal vez al lado de la persona indicada hubiera sido distinto, y si bien de adolescente pensaba que a los 25 iba a tener la vida solucionada, la verdad es que llegado el momento ni a palos me sentía preparada para ser madre.
    La vida moderna para las mujeres apesta, no hay una solución creo que nos deje enteramente felices, ni resignar los hijos ni la carrera. Creo que la solución sería que se regulara de alguna forma el trabajo de las mujeres (y no me refiero a leyes solamente, sino a esa concepción ridícula que tenés que hacer carrera antes de los 30, ser estudiante de medicina con experiencia o con residencia completa y ese tipo de ridiculeces)... y sino prolongar la vida fértil, tipo hasta... los 60 años? jajaja. Yo creo que sería muy feliz si pudiera tener hijos sin problemas llegando a los 50, creo que tal vez en ése entonces me sentiría realmente preparada (pero cuando llegue te cuento, tanto si puedo llegar sin demasiado achaques como pensar que ya soy suficientemente madura)

    Besos!

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  9. Hola, soy brielle, gabi en realidad.
    Estaba leyendo tu blog y pienso e insisto: Cada uno hace de su vida.... lo que quiere, para decirlo decorosamente. A la gente que cuestiona la manera de vivir de los demás no la entiendo.
    Ser feliz y dejar ser.
    Beso.

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  10. Cada cual tiene sus motivos y sus tiempos. Yo estoy en pareja hace 10 años nada menos. Desde los 21, lo que también se puede considerar chiquita.
    La primera vez que él me dijo que quería tener un bebé yo lo saqué carpiendo (y con esa frase se me nota lo vieja chota). No me sentía lista, quería hacer miles de cosas antes...
    Hasta que un buen día, como decís vos, se me prendió el chip Susanita y acá me tenés, con un retoño de 3 meses. La verdad es que lo busqué aun no sabiendo si estaba lista, en el medio de un proyecto laboral que crecía y crecía, pero nada de eso me importó mucho. Ese era mi momento y punto.
    Lo principal, creo, es poder decidir con libertad, sin presiones, sin prejucios...

    un beso!

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  11. Lola, buenísimo el método para evitar preguntas! Coincido en lo de los hijos deseados y no buscados; creo que si yo sentí que tenía que dar explicaciones fue precisamente porque hay algo implícito en la pregunta: "Ahhh, no lo buscaste, sos medio boluda entonces, y te debés querer matar!", y No, y NO! No tiene por qué ser así... En fin, sí, estamos de acuerdo en que no hay una solución rápida y cómoda a la maternidad actual, pero ¿hijos a los 50? NO WAY!!!

    Gabi, espero que entiendas que trato de hacer precisamente eso: vivir y dejar ser...Esto trató simplemente de ser un análisis sobre las distintas posturas y opciones de hoy; ninguna me parece mejor que la otra!

    Mate, decidir con libertad, como decís, es lo ideal. Yo tuve la ¿suerte? de que el chip se me prendiera justo cuando tenía al lado a esa persona con la cual tener un hijo, y me pregunto si es suerte porque sospecho que el causa-efecto tuvo mucho más que ver ahí... Qué copado que hayas dejado en pausa un proyecto laboral que crecía. Bien por elegir con el corazón, el chip domina al mundo!!

    Besos chicas!

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