miércoles, 27 de julio de 2011

Dieta: ¿hasta cuándo?

Nunca fui flaca. Nunca voy a ser flaca. Voy a estar más o menos flaca, ojalá, en algún momento. Pero toda la vida, por ejemplo, mis piernas se van a rozar. La tanga hilo dental es una idea que jamás cruzaría seriamente por mi cabeza. Se dan una idea.

A mí me preocupaba cómo el tema del embarazo iba a impactar en mi cuerpo. Por eso, unos meses antes de empezar a buscar, bajé 5 kilos, para después no quedar demasiado lejos en la balanza. Y esa fue una de las mejores decisiones que tomé. Quedé embarazada con 65 kg, G nació cuando yo contaba con 81, y después de los primeros meses, me estanqué en 70. Así estaba yo a principio de este año. Pantalones de maternidad, ropa suelta, olvidate de la bikini. Por mis propios medios llegué a 66,5, ponele. Y ahí fui a la nutricionista. Ahora estoy en 63 (esta semana subí medio kilo, por primera vez), y acá se empieza a poner complicado el tema.

Para mí, para lo que soy, para lo que fui toda mi vida, pesar 63 es estar flaca. No wow, no que alguien se va a dar vuelta para mirarme, pero ok. Y justo en este momento se me presenta lo del casamiento. No sé, digo, ¿no debería querer seguir bajando? Bueno, sí, quiero, pero la verdad es que me está costando muchísimo más. Un poco porque hace más de un mes que estoy a dieta, o casi, un poco porque ya me veo mejor, un poco por ansiedad, un poco porque muero de ganas de comer torta de brownies y es fácil escuchar a los que te dicen "dale, si estás re flaca!". Complicado.

Ayer una amiga vino con un pantalón de otra amiga, una que yo considero flaca. Un pantalón que le quedaba grande, obvio, pero venía de ella. Yo la miré y le pregunté "¿y qué se supone que yo haga con esto?". Y me lo hizo probar. Y me lo probé, y obvio que no me entró. Pero me subió, y me faltarán, no sé, 2 o 3 cms para que cierre. Entonces el nuevo plan es: me lo voy a probar regularmente, hasta que me entre. Ese será el glorioso momento en que finalmente me dé el alta de la dieta. Seguiré yendo a la nutricionista, porque claramente mi mayor desafío va a ser el mantenimiento. Espero llegar a ese alta imaginaria antes de septiembre, pero si no, y bueno, que así sea. Yo ya estoy tranquila: sé qué me voy a poner para la fiesta, ya experimenté el placer de ir a un local, probarme lo que hay, y que me entre y me quede bien de entrada, sin luchar, sin pedir un talle más, sin hacer raras contorsiones en el probador buscando un ángulo improbable que  haga que me siente un poco mejor.

No sé qué pasará. Si efectivamente paso esta prueba, prometo animarme y mostrar el antes y el después. Y si no, bueno, al menos intentaré mantenerme en este peso, en el que me siento cómoda, no la diosa inolvidable, pero, you know, an acceptable-looking mom.

5 comentarios:

  1. Si estàs màs flaca que antes de quedar embarazada (habiendo hecho la dieta!) quiere decir que objetivamente estas mucho màs flaca!

    Pero reconozco que es un problema verse flaca... porque una empieza a darse "permisos" y se deja caer en la tentaciòn de comer.

    En las fotos que publicaste de la fiesta en la escuela, se ve re bien y eso que es invierno y una se pone ropa pesada. Yo creo que vos tenés el autoestima baja... seguramente el dia de tu casamiento vas a estar hecha una DIOSA INOLVIDABLE!!!

    Besos y a seguir para adelante!

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  2. aporto que.......vas a ver en esos dias de septiembre vas a bajar la migaja que te falta!!! si decis que estas gorda, yo me mato, tengo 60 Kg. mientras que pese siempre 47..y yo me veo barbara!!!!!!!

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  3. Tal vez tendrías que hablar con tu nutricionista, si es que es copada (aclaro que si bien conocí una o dos nada más, nunca encontré ninguna copada, así que creo que es dificil). Porque creo que la idea no es que nunca más puedas comer torta brownie ni nada que te guste, aún cuando pensás que todavía te falta un poco. En el mundo real hay tortas, alfajores, budines, asados y pastas, y tantas otras cosas engordantes de la que no es fácil zafar, sea por compromiso o por mantener la dieta.
    Habría que ver cada cuánto podés comer algo que te gusta sin que eso repercuta negativamente en el proceso, o qué podés hacer para compensarlo y listo. Yo creo que las dietas no funcionan uno siempre la termina mandando a la miercoles tarde o temprano, y cuanto más estricta más (más la mandás a la miércoles, me refiero)
    Creo que podés darte un gusto y disfrutarlo, uno, no veintiocho, y te vas a sentir mejor.
    La dieta vos sabrás cuándo es el momento de empezar a dejar de bajar y mantenerse, no te guies tanto por la balanza, el pantalón es una mejor opción.
    Besos!

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  4. La cuestión principal es q vos te veas bien creo yo. Pero, si creés que te faltan uno o 2 kilos y estás enganchada con la dieta, dale para adelante! como dice Lola, un gusto te podés dar, sobre todo en tu caso que es casi nada lo que querés bajar. Yo también te ví en las fotos y estás bárbara!

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  5. Mai, graaacias! Ni siquiera creo que sea baja autoestima... no sé, no llega a bajonearme realmente el tema, pero no sé qué es mirarse al espejo y quedarse conforme.

    Delosuspiros, 47 es un número que sólo veo... ¿en la quiniela?? jaja

    Lola, la vez que la nutricionista me dijo "y bueno, acá te podés comer un McDonald's" pasó a ser mi ídola forever. Es difícil darse UN gusto... yo me abstengo de toda felicidad hasta que caigo... y voy por los 28!

    Marie, venía bárbaro, te juro! hasta que... me llevaron de vuelta a Pilar Point. Así no se puede! Juegan con mis sentimientos!!

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