No quiero abandonar mi vida, mi blog, mi hijo, por una fiesta. Tampoco quiero subestimar el valor y la importancia que esta fiesta tiene en mi vida. Después de todo, me caso, y planeo que sea la primera y última vez que digo esto (mirada furtiva de costado a J, que va por su 2da vuelta). Después de todo, mi hijo cumple años, por primera vez. Lo mantuvimos vivito y coleando por 365 días. Ok, con un pequeño corte en la cara, una roturita menor. Pero básicamente, está entero y feliz, y eso da para celebrar.
Así que estoy entre esas dos posturas casi todo el tiempo. "Bueno, basta de pensar o hacer cosas para la fiesta, la vida continúa" y "Bueno, re copado seguir viviendo la vida, pero la fecha se te viene encima y hay 350.000 cosas pendientes". Algo así.
Para bancar a la primera vocecita mental, puedo reportar orgullosamente que:
-Festejé el día del amigo en casa con mis más queridas.
-Canté y festejé en la fiesta karaoke de Mai, mi testiga, que cumplió 27 años.
-Le hice la torta de brownies más patética de la historia.
-Fui a ver Harry Potter con mi hermana y mi cuñado.
-No abandoné las clases de costura ni el gimnasio.
Por otro lado, a la vocecita mental nº2, le puedo cerrar la boca contándole que:
-With a lot of help from my friends, las lámparas colgantes ya están casi terminadas, colgando desprolijamente del hilo sisal que atraviesa mi living en distintas direcciones.
-Las invitaciones ya están pensadas, diseñadas, e impresas. Hay que armarlas y repartirlas.
-Ya tengo el atuendo para la fiesta, y una diseñadora trabajando en el vestido para el civil.
-Mañana cierro con el dj y otras cositas, y el martes -quizás- con el fotógrafo.
-A G ya le compré el pantalón y un saquito para el bautismo.
Un poco y un poco. La onda es no convertirme en Bridezilla, pero tampoco llegar al 3 de septiembre, abrir el ropero y preguntarme "¿Y qué me pongo?"
VISTE COMO ARREGLASTE EL DESGASTE DEL FESTEJO DEL DIA DEL AMIGO, IGUAL TENES QUE HACER....TERCERIZA, TODAS LAS MUJERES SE PONEN FELICES CREYENDO QUE LA ELEGISTE PORQUE COMO ELLA NADIA HACE LOS SOUVENIERS, O TIENEN EL CONTACTO EXACTO DEL CATERING...
ResponderEliminarVenìs bastante bien!
ResponderEliminarPero no dudes en pedir ayuda... a veces ser demasiado autosuficiente es agotador y tenés que llegar a septiembre enterita!!!
Besos
No sé si es un verso moderno o qué, pero ahora es como que catalogaron un tipo de depresión que les agarra a las mujeres luego de casarse porque claro, estuvieron dos años en los que su vida giraba alrededor de ese día, y después pasa tan pronto! que de repente se encuentran con que no tienen en qué ocupar su tiempo, y fundamentalmente su cabeza y se deprimen, al punto que no pueden mirar las fotos del casamiento pensando "era tan feliz..." como si uno se casara para casarse nomás y no para pasar la vida junto a otra persona.
ResponderEliminarNo me parece en absoluto que corras ese riesgo, así que por eso, planificá todo lo que quieras, y lo que no, lo dejás para el primer aniversario que va a coincidir con el 2º cumple de G. y listo!
Tampoco es lindo llegar al día de tu casamiento super estreada corriendo con los preparativos (pagaría por ver todas esas paper lanterns esperando su gran día!)
Y otra cosa buena que tenés es que al no casarte por iglesia aprovechas después a full los días porque obviamente en el trabajo te los dan a partir del civil y en general en vez de en la luna del miel los gastás corriendo con los últimos preparativos para la iglesia y la fiesta.
Por lo que contás vas más que bien. Lo bueno de estas ocsaiones es que si bien perdés tiempo antes buscando el vestido y demás, ese día ya no tenés que pensar en el qué me pongo, jajaja
Besos!
de los suspiros, Mai, es verdad, la clave está en pedir ayuda, pero no sé cómo hacerlo! No es de humilde, todo lo contrario, es de bitch autosuficiente que no cree que alguien pueda hacer algo, cualquier cosa, mejor que yo. Pero mis amigas me están ayudando, trabajamos todas juntas, charlamos y nos divertimos, y está buenísimo.
ResponderEliminarLola, no me parece ninguna locura, ningún 'verso', aunque sí un gran rollo moderno. El otro día una chica estaba frenética en el cumple de una amiga porque el casamiento era YA-YA-YA. ¿Cuándo? El 29 de octubre. Cuando al ratito se enteró que yo me casaba en un mes y medio, y que lo había decidido una semana antes, casi se muere, y me mata.
Obvio que cada una con lo suyo, pero ese que describís es mi miedo: tanta energía puesta en un día, cuyas horas pasan tan rápido (o más!) que cualquier otro...
En breve muestro las lanterns que inundan mi casa!
Igual les digo, con lo low-budget, low-profile que viene esto, no es joda que casarse es estressante, ¿eh? Ni me imagino cómo la pasarán las de los mega eventos!!