Ni blanca, ni radiante

Wow. Pasaron 5 días desde el último post. Y las cosas cambiaron mucho más de lo que cambian generalmente en 5 días cualquiera.
¿Vieron que G cumple años el 2 de septiembre, y que al otro día lo vamos a festejar con toda nuestra familia y todos nuestros amigos? ¿Y que ya que estamos, también lo vamos a bautizar, así tenemos doble festejo?
Bueno, como no hay 2 sin 3 (?), le agregamos otro yaquestamos, sort of, y nos vamos a casar. El 2 de septiembre. Los conté: faltan 40 días.
O sea que en 40 días paso a ser una mujer casada. What?

Fue una decisión bastante loca, bastante espontánea, pero basada en razones absolutamente lógicas y prácticas. Resulta que el año que viene también voy a trabajar un solo turno, hasta las 12, como estoy haciendo hora. Lo cual es fantástico y maravilloso, porque voy a estar más tiempo con G, pero también implica que no vamos a poder ahorrar un centavo. Y sin poder ahorrar, imposible casarnos. Entonces, nos cerró muchísimo hacerlo ahora, seguir mutando este festejo que ahora se convirtió en una celebración de la vida, todos juntos pero no revueltos, agradecidos de estar juntos, de ser felices, de estar rodeados por tantísima gente que nos quiere. Y sincerándonos con nosotros mismos, tampoco nos cerraba gastar tanto tiempo, dinero y energía en un megaevento cumpleañístico que el homenajeado jamás recordará, y nadie sabe   a ciencia cierta si lo disfrutará, siquiera.

En fin, estoy feliz. Pero mis miedos, mis inseguridades, todas mis dudas, siguen ahí. Los traté de acallar con la falta de tiempo, pero no, los muy turritos se las ingenian para hacerse oír, desde allá a lo lejos, desde el fondo de mi cabeza. Así que estoy en constante negociación conmigo misma. Por ahora sólo llegué a estas conclusiones:
-Quiero vestido, pero corto y no blanco. Buscamos variantes: tiza, cremita, crudo, marfil, té con leche, beigecito, no sé, claramente no tengo idea de colores.
-Va a haber fiesta, pero de día.
-Va a haber música, pero al que pretenda revolearme por el aire, lo echo. Si alguien pronuncia la palabra vals, lo destierro.
-Seguramente haya fotos, pero nada de la pelotudez de la novia con el ramito mirando el horizonte. Fotos de la gente, de la alegría, muchísimas de G.
-Alcohol sí, of course, pero haré lo posible por enfatizar mi deseo de NO tener gente imposibilitada de caminar o articular una frase o comerse un cupcake. Palabra clave: bautismo.
-Invitaciones sí, pero caseras.
-Pinwheels por todos lados. Palabra clave: 1 año.
-El video me parece una ridiculez que jamás volveré a mirar.
-Si alguien quiere hacernos un video para ese día, ok, pero sólo autorizo la publicación de fotos mías durante la época J. Antes era tan emo sin causa que me doy pena. J me regaló mi propia sonrisa.
-Gracias a Dios, no tengo una opinión formada respecto a Dios. Gracias a J y a su matrimonio previo, no me puedo casar por Iglesia. Así que mi padre no me llevará del brazo hacia ningún altar. Gracias, V (ex mujer) por esto!!
-Para Ramos está Diego, o el Domingo. Para tirar, está la goma. (Palabra clave: mefuialcarajo)

Y a esta la pongo última, pero es la más importante de todas, la que no negocio:
-LA NOCHE DE LA DESPEDIDA DE SOLTERO DE J, ME TOMO EL DOBLE DE LA DOSIS DIARIA RECOMENDADA (?) DE RIVOTRIL. Es eso, o enloquecer. Es eso, o subir a G al auto y salir a buscarlos por todo Buenos Aires. Es eso, o llamar al cerrajero para no dejarlo entrar nunca más. Es eso, o tomarme un avión a Bermudas. Es eso.

"esunanocheconfiáenJesunanocheconfiáenJesunanocheconfiáenJ"

Es una noche. Confío en J.