sábado, 5 de noviembre de 2011

La cosa no camina

En el post anterior, mencioné que quería leer la Guía Inútil para Madres Primerizas, y alguien, con la mejor intención, me recomendó que no leyera tanto sobre maternidad. En realidad, mientras estaba embarazada y durante los primeros meses del bebé, devoré cuanta literatura sobre el tema pude encontrar. Hice que me trajeran de USA el famosísimo "What to Expect When You Are Expecting", y recontra valió la pena. Después,  me basé mucho en esas páginas reconocidas como Baby Center, que primero te van contando el tamaño del bebé en la panza y comparándolo con frutas, y después te va marcando las pautas de cómo manejarte con tu recién nacido.

Pero todo eso se fue decantando solo; hace meses que los mails semanales son sistemáticamente borrados sin ser leídos, o a lo sumo después de una ojeada rápida. No es que me crea la súper mamá, obvio. Claramente no siento que me las sé todas y que no hay nada que un especialista me pueda enseñar. No. Pero tengo que reconocer que, con el tiempo, la desorientación total va dando paso a una etapa más calma, más relajada, más segura para la mamá en constante aprendizaje. Cuando la maniobra de cambiar pañales se vuelve un acto tan automático como manejar, cuando finalmente te vas a dormir a la noche sabiendo que "hasta mañana" significa exactamente eso, cuando el niñito ya puede hacerte entender más o menos efectivamente qué es lo que le está pasando... la canchereás un poco, sí.

Me acuerdo que estaba tan perdida que hasta busqué en YouTube un video para aprender cómo carajos se baña a un recién nacido; que aprendí a enseñarle a aprender a dormirse solo leyendo el Duérmete Niño, que leía las indicaciones del Termofren todas las veces que se lo tuve que dar. Y no me arrepiento de nada de eso, y sé que en cuanto la vuelva a necesitar, Internet y la literatura van a volver en mi auxilio.

Pero volviendo al principio, esta Guía de la que les hablaba es la anti-guía, es el libro que más me gustó porque es el que tiene el mensaje que más me marcó a fuego y el único que consejo que me animo a dar a una embarazada o una primeriza recién iniciada: hacemos lo que podemos. O lo que nuestros hijos nos dejan hacer. Trabajar adentro o afuera de casa, o no trabajar pero igual tener mucama y niñera, todo eso está bien. Que el chico duerma en moisés, en cuna, en un cajón de manzanas o en la cama con nosotros, es una decisión que se debería reservar a cada familia.

Las nuevas mamás estamos tan llenas de voces externas, que nos remite al gran pensador contemporáneo Charly García: "no puedes ser feliz con tanta gente hablando, hablando a tu alrededor". Tías, abuelas, cuñadas, amigas, suegras, opinadores en general, todos tienen algo para decir. Todos se jactan de saber mejor que vos qué es lo adecuado para el niñito, o al menos de tener la seguridad de que VOS no lo sabés del todo. Y hay que tener la mente muy fría y calculadora para no dejarse llevar por todas esas voces recontra bien intencionadas cuando sos una coctelera hormonal.

Pero todo eso ya quedó atrás, ya logré que mi pequeñito sobreviva un año entero; se lo ve sano y feliz y nuestra pareja está intacta, listo, se ve que ya me gané unos cuantos créditos en la carrera materna.

Y sin embargo, hay una materia en la que nos estamos quedando. Ya lo saben: el nene no me camina. Se agarra de todo y de todos, va de la mano, arrastra las sillas, incluso se desliza por las paredes cual Spiderman, pero en el instante que lo soltás, chau, se tira al piso y a gatear se ha dicho. Y yo, que no me tengo estudiados los percentiles pero sé perfectamente qué espero de mi propio niño, me frustro. No me enojo, no me avergüenzo, no me preocupo: me frustro conmigo misma por no saber esperar, por no poder dejarlo en paz, y, principalmente, por haber hecho de este dato que eventualmente será insignificante, la tarjeta de presentación de G.

"Qué lindo qué está!" "Sí, pero no camina".
"Qué grande!" "Sí, viste, ya podría caminar, pero no".
"Qué vivo, mirá cómo hizo tal o cual cosa" "Sí, podría usar esa viveza para empezar a caminar de una vez, ¿no?"
"Ay, qué buenito que es!" "Sí, buenito y vago, porque caminar, ni miras"

Y así. Obviamente la respuesta es siempre "bueno, ya se va a largar", "el sobrino de mi cuñado se largó a los 2 años y hoy juega en la reserva de Chacarita", y la omnipresente "¿Para qué querés que camine? Después, cuando lo tengas que correr por todos lados te vas a querer morir".

No sé por qué lo hago. Supongo que es un mecanismo de defensa: al tirarlo así de entrada, obligo a la otra parte a darme la respuesta tranquilizadora, mientras que si dejara que fueran ellos los que trajeran el tema, sería yo la encargada de dar explicaciones que no tengo.

El libro este, decía, trata el tema. Más específicamente, se ríe de los que no entendieron que los chicos empiezan a caminar MÁS O MENOS al año, y que esto puede significar que el chico tenga menos, pero también más, que 365 días. Se ríe de la gente que presiona y presiona para jactarse de haber sido quien lo alentó a dar los primeros pasos, se ríe de las madres preocupadas por el tema. Se ríe de mí. Y eso, lejos de aumentar mi neurosis y preocupación, o de revolear el librito hacia la hoguera de mi frustración, me hace reírme de mí misma. Y recordar que tengo toda la vida para disfrutar de cada etapa de mi hijo.

13 comentarios:

  1. Uno de mis sobrinos, que siempre se destacó por ser súper inteligente, se largó a caminar como al año y medio y a hablar a los tres.

    Si te sirve de algo que te lo diga. Además supongo que a tu nene lo llevás al pediatra y demás, así que creo que sólo es cuestión de esperar.

    Es el carácter de cada uno. El debe ser tranquilito y debe estar muy mimado. Para qué apurarse, pensará él...

    Besos!

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  2. Ann, qué decirte cuando ya te lo dijiste todo! Viste cuando uno lo sebe pero no???? Esa manera tan misteriosa de ser que temenos los seres humanos. Me gusta que te rías de vos, tu hijo debe ser muy feliz con una mamá que se sabe reir.
    Y para que te quedés más tranquila y no llevés a la criatura al Instituto PerKinson para Niños de 1 Año que no Caminan, mi hijo F caminó al año y tres meses y mi niña C tiene 1 año y dos meses y hace una semana que camina.
    Besos enormes a vos y al niño.

    Fer
    www.fabulinas.blogspot.com

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  3. Yo no soy madre todavía,pero tengo ganas y me pongo cada vez mas loca,yo se que me voy a devorar esos libros sobre madres primerizas,pero mi mama me dijo que no le preste mucha atención,que se yo.

    bsos
    ayez

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  4. Qué podemos hacer si somos madres ansiosas?!

    Matias se largò a caminar solito, soltandose de todo y todos, el dia de su primer cumple... pero hasta el momento yo estaba super preocupada porque mi hijo NO GATEABA! y nunca gateò, directamente caminò!

    Puede ser que G se haya caido y se asustò, o que sencillamente todavia no se siente pronto para largarse solito.

    Yo estaba igual, pero con el tema de que no habla y ya tiene 2 anios y casi 9 meses... y una cosa lleva a otra, y ahora hasta que no le hagan los estudios, el hecho que no hable es un detalle nomas...

    Es inevitable no preocuparse, porque queremos que sean los mejores, los mas lindos, los mas inteligentes, los nenes de publicidad. Y no nos damos cuenta, que son todo esto y mucho màs... pero ellos también tienen sus tiempos!

    Besos Ann

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  5. Hola!! si, yo me pasé tirada en una hamaca paraguaya leyendo libros sobre crianza en mi último trimestre de embarazada y me sirvió mucho porque mi conocimiento sobre los bebes y niños era el mismo que tendría un E.T.

    Ahora ando por el cuarto hijo (y no voy a seguir, ni hablemos), y una amiga primeriza me regaló una pilita de revistas ¨parenting¨ que se trae de USA cuando viaja por trabajo. Las notas son al estilo americano, con consejos extremos sobre salud, alimentación, el aire más conveniente para respirar. pero ya no tengo energía ni tiempo para leerlos. Interesados en ellas: están en la pila de diarios viejos en mi garage-
    besos!

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  6. No les dès bola. A nadie.
    Nuestros niñitos tienen todos tiempos distintos, somos nosotras las que los apuramos a veces, sin darnos cuenta, obvio. Yo tengo a mi nene de 5 años y noto una carrera desenfrenada para alfabetizarlos. Algo que para mi es absolutamente al pedo porque la lecto escritura tiene un proceso! en fin, sè que es difìcil porque a mi tambièn me pasa, pero que dejen a los pibes ser pibes!!!!

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  7. ah, el mio empezò a caminar al año y dos meses, asi que nada...it depends, you know...

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  8. Siempre hay algo por qué preocuparse, y si bien puede ser un dolor de cabeza por las miles de cosas que pensás, también está bueno preocuparse por algo, me parece. Con mi cuñado yo estaba re preocupada porque sabía que entendía absolutamente todo lo que le decíamos y el loco nada, no quería hablar! No te decía nada más que "ta" "agua" y "mamá", pero nada nada, le preguntabas algo y trataba de hacerse entender, pero de hablar nada, y yo me daba cuenta que entendía todos los detalles de lo que le decíamos... Y en eso empecé a ver más de su personalidad, el tipo tiene su carácter y necesitó hablar para lagarse porque estaba cómodo y tranquilo comunicándose como siempre! Con los gurises pasa como con los adultos, hasta que no necesitamos un mecanismo no lo adoptamos! Hay niños más curiosos que quieren caminar, correr, hablar, cantar, leer desde siempre y hacen todo rapidísimo porque necesitan expresar todo eso, y hay otros que están cómodos, pueden gatear toda la vida mientras no vean las ventajas de caminar y se animen a hacerlo! Lo bueno de esto es que inevitablemente en algún momento G se va a dar cuenta que caminando puede llegar más rápido y más cómodo, y que no es un esfuerzo tan grande, que si se cae no pasa nada, y lo va a hacer ;) Es un viaje, pero así chiquitos como son, tienen su temperamento como todos y para algunos encarar un nuevo desafío no es tan entusiasmante y esperan hasta cuando ya es inevitable!

    beso!

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  9. Hola Ann, no hay regla para esto y encontramos de todo... desde el más precoz, hasta el más remolón, y eso no es pauta de conducta para su futuro....él decidirá, vos relajate. Cuanto menos lo pienses, ahí será... Igual las madres primerizas somos así...me incluyo, todo nos preocupa.

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  10. yo te facebukeo todo lo que quieras, todo!!!!!!!!! pero como te buscoooooooo! buscame vó a mi !!!!

    liliana martinez, cual dice en todos lados!! amiga de zapallos, de marcela . de ale...y muchas más! jajaja

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  11. ann....ann............te lo digo, él va a caminar, cuando quiera....cuando se sienta seguro, y sepa que no se va a matar a golpes...es asi, palabra de madre de dos, que caminaron a su debido tiempo!

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  12. Gracias, chicas, sé que va a caminar eventualmente, pero estamos en una edad crítica!

    Ayer fuimos al pediatra para su chequeo de control, y nada, el doctor, que es muuuy pancho en general, no me dio ni cabida para la preocupación. Es más, me dijo "sí que camina!" y lo agarró de la mano y lo acompañó unos pasos por el consultorio. Así que todo bien; igual me sirve dejarlo asentado acá, porque me sentía un monstruo horrible que lo único que podía ver de su bebé era la falta!

    Les juro que no es así, G es hiperactivo y lo disfrutamos todos los días, cada vez más.

    Analía, bienvenida! Ya estuve fisgoneando por tu blog.

    Lili, ya te encontré! Creo que no tenés conciencia de cuántas Liliana Martínez hay en el planeta Tierra, querida! Si no me dabas el dato de Ale, jamás te iba a encontrar!

    Beso a todas!

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  13. Ann, como siempre las cosas que nos suceden son tan similares que es muy fácil ponerme en tu lugar.
    También leí la guñia inútil, y me pareció brillante.
    El mío no gatea ni lo intenta, no dijo ni un atisbo de palabra (y todos preguntando "ya dijo mamá?) y estoy segura que hará las cosas cuando se le canten y cuando nadie lo espere.

    Disfrutalo, eso es lo más importante de todo.

    un beso!

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